Comienza el Ramadán para cientos de miles de fieles musulmanes en España. Y comienza este miércoles, 11 de agosto (por segundo año consecutivo comienza en este mes), en plena canícula, con temperaturas muy altas y días muy largos.
Durante este mes, que conmemora la revelación del Corán al profeta Mahoma, los musulmanes (hombres y mujeres adultos) no pueden ingerir alimentos ni bebidas y deben abstenerse de mantener relaciones sexuales desde la salida del sol hasta el ocaso, para cumplir así con el sawn -ayuno-, uno de los cinco pilares del Islam.
Este año, el mes de Ramadán, el noveno en el calendario musulmán, ha caído en pleno verano, por lo que el ayuno, al ser los días más largos, tiene una duración mayor (y, por consiguiente, el esfuerzo físico del ayuno se hace también más exigente).
La variación de la celebración del Ramadán de año en año -en 2008, por ejemplo, tuvo lugar entre el 1 y el 30 de septiembre- se debe a que esta fiesta se rige por el calendario islámico, que a diferencia del gregoriano (el nuestro), es lunar.
El calendario lunar es más corto, concretamente 11 días más corto, que el solar (o gregoriano). Esta es la razón del aparente desfase que, desde nuestra óptica, se produce cuando se traspasan los días de uno a otro.
La salud de los temporeros
La exigencia física del ayuno ha llevado a algunos empresarios agrícolas catalanes, informa El País, a hacer firmar a los temporeros musulmanes un documento en el que les eximen -a los empresarios- de cualquier responsabilidad mientras trabajan en la recogida de fruta.
Esta medida ha suscitado, según asegura el citado diario, tanto la oposición de diversas asociaciones islámicas de Lleida como del Departamento de Trabajo de esta provincia, que han expresado sus dudas sobre la validez de dicho documento.
En este sentido, las autoridades musulmanas en España han recordado el acuerdo de cooperación entre el Estado Español y la Comisión Islámica de España que recoge expresamente en uno de sus artículos que los musulmanes que los deseen -entre 1,5 y 2 millones, según la Junta Islámica, incluyendo a los irregulares- "podrán solicitar concluir su jornada laboral una hora antes de la puesta de sol durante el mes de Ramadán".