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La franquicia egipcia de postres B.Laban sigue causando furor en Casablanca. Desde su apertura en febrero en el vibrante barrio de Maarif, B.Laban no ha tenido un solo momento de respiro, con interminables filas de clientes dispuestos a esperar horas para degustar sus cremosas delicias lácteas. Sin embargo, este éxito arrollador ha traído consigo un nuevo desafío: los revendedores.
Numerosos individuos se forman en la fila únicamente para revender los productos cerca de la tienda, apuntando a los amantes de los postres que no quieren esperar. Yabiladi ha observado a estos revendedores en las últimas semanas, a menudo apostados junto a edificios vecinos o en la calle, haciendo señas a los coches para ofrecer los productos de B.Laban.
¿Los precios? Naturalmente, son más altos que los de la franquicia, justificados por las largas horas de espera que los revendedores soportan para obtener lo que se ha convertido en un producto muy codiciado en Maarif.
«Después de un cierre temporal, pensábamos que las cosas se calmarían y estarían mejor organizadas, pero es aún peor», lamenta un residente de Maarif que vive cerca de la tienda B.Laban, al observar que las multitudes siguen perturbando el barrio. «Las personas que todavía hacen fila hoy en día son sobre todo los repartidores y los revendedores», confió esta fuente a Yabiladi. «Incluso organizan subastas en los callejones, lejos de las miradas, y la gente compra», añade.
B.Laban denuncia a los revendedores
La franquicia egipcia, popular en todo el Medio Oriente, ha condenado esta práctica. En un post de Instagram, B.Laban publicó una advertencia: «No somos responsables de los productos revendidos por particulares». La franquicia también expresó preocupaciones sobre la seguridad de estas prácticas, afirmando que algunos revendedores «compran productos por la mañana, los dejan al sol todo el día y luego los revenden por la noche».
Es importante destacar que la apertura a lo grande de B.Laban en Marruecos ha suscitado críticas por parte de los residentes y comerciantes locales de Maarif debido al caos provocado. Las filas obstruían el tráfico, lo que llevó a una serie de cierres ordenados por las autoridades locales, que «amenazaron con cerrar definitivamente si no se restablecía el orden», declaró el propietario en un video en febrero. La tienda efectivamente cerró durante dos semanas antes de reabrir poco antes del Ramadán.
El lanzamiento de B.Laban en Marruecos fue precedido por una amplia campaña en las redes sociales. Según su perfil de LinkedIn, la franquicia cuenta con más de 120 sucursales en nueve países, incluidos Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Omán, Jordania, Catar y Kuwait. Se prevé próximamente una segunda franquicia en el barrio de Bourgogne.
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